peticion por mi matrimonio
Sagrado corazón de Jeus, hoy más que nunca quiero confiar en ti, sabes que desde hace tres meses estoy separado de mi esposa, solo tú sabes cuánto la he buscado, y he podido recibir de ella cierta apertura, pues como tú conoces ella dice que aún no está segura de mi, tú conoces en mi corazón y en mi proceder que no soy una mala persona, más bien quisiera que mi matrimonio esté fundado en la roca, Sagrado corazón de Jesus tú conoces que quiero conquistarla, pero ella cada que yo la busco me recibe pero se me esquiba, Tu conoces que soy muy débil para decirle aqui esto termina, o toma una decición rápida, mi debilidad hace que sufra cada día más, Te pido Sagrado corazón de Jesus, me permitas volver a tener mi matrimonio y asi con mi arrepentimiento y mis ganas muy fervientes poder hacer una vida larga con mi esposa asi como la de mis padres, Sagrado Corazón de Jesus, siento que mis métodos se han acabado, solo tú puedes tocar el corazón de mi esposa y hacerle que vuelva y formar un hogar santo, te lo pido por Ella, mi hijito, y Yo, confio tanto en tí pero día a día, con mi impaciencia, vienen pensamientos horribles y no quiero juzgar por que yo tampoco quiero que me juzguen, Sagrado Corazón de Jesus dime si esta petición que creo yo es noble, y que además está acabando con mi vida, me la puedes conceder, se que si, pero ya no quiero sufrir más con su recuerdo y el pensar día a día que ese día llegará tan pronto que cada día que pasa para mí es un verdadero martirio, hasme sentir mi Sagrado corazón de Jesus que lo que te pido, si es posible para tí, se que ella aún me ama, se que mi hijito me ama.
Tú sabes que cada que la busco, siento desamor, no quiero humillarme más, dime que debo hacer, se que mi matrimonio se unirá, pero con mis métodos no lo haré, ayudame Sagrado Corazón de Jesus, tu sabes cuano ala amo y cuanto amo a mi hijito, no quiero que mi tiempo de espera en ti se haga tan feo e indecifrable, ayudame a tener fe, para poder día con día trabajar, comer bien, tener alegría, no tener celos ni envidia, Padre mio, quiero abandonarme a ti confiado en que mis suplicas han sido escuchadas.
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